Carlos Pizarro pasó de tener un fuerte dolor de estómago a ser internado en una Unidad de Cuidados Intensivos en la antigua Clínica Saludcoop de la 80, con complicaciones en el hígado, los pulmones y el intestino, debido a que el personal no diagnosticó a tiempo su enfermedad y fue operado dos días después de una peritonitis avanzada.

Así lo relató su hermano Héctor Pizarro, quien también contó cómo en el primer piso de la clínica hay decenas de pacientes que son atendidos en camillas y recordó su sorpresa cuando vio en una de las ventanas del centro de salud el mensaje: “Te queremos atender, pero no tenemos con qué”.

Este es solo uno de los casos que viven los pacientes de Cafesalud ante la crisis por la que atraviesa la EPS.

A la situación se suma que casi 40 hospitales públicos de Antioquia y unos más privados han cerrado servicios ambulatorios a los afiliados de esta EPS, por la alta deuda que tiene con ellos. Únicamente atienden las urgencias.

“Cafesalud solo ha pagado, si acaso, el 45 por ciento de lo que le han facturado desde que empezó a atender a los pacientes de Saludcoop, en diciembre del año pasado. Saludcoop en liquidación le quedó debiendo a los hospitales públicos de Antioquia casi 40.000 millones de pesos”, expresó Luis Alberto Martínez, director de la Asociación de Empresas Sociales del Estado de Antioquia (AESA).

Añadió que el cierre de servicios ha afectado a 300.000 pacientes en el departamento, donde la EPS tiene 780.000 afiliados.

Según Diana Patricia Guerra, asesora para el Observatorio del derecho fundamental a la salud de la Personería de Medellín, esta situación está ocasionando que no programen las cirugías oportunamente, no entreguen los medicamentos y los tratamientos queden incompletos.

Entre los casos más graves que ha conocido la entidad están los pacientes con cáncer, los oxígeno dependientes y los que esperan cirugías. “Cafesalud tiene a alguien en la Personería buscando soluciones para los usuarios que acuden a buscar una acción de tutela”, sostuvo.

Indicó que en este momento no se tiene el dato exacto de las acciones de tutela contra Cafesalud, pero afirmó que en la rama judicial hay 5.289 en total en la ciudad por el tema de salud. Asimismo, dijo que las peticiones más frecuentes son insumos, cirugías y citas con especialistas.

Aclaró que han aumentado los incidentes de desacato, debido a que las entidades no cumplen los fallos de las acciones de tutela a favor de los pacientes.

Entre tanto, Martínez reiteró el llamado al Gobierno Nacional para que actúe frente a esta problemática. Considera que se debe hacer una intervención institucional, por parte de una firma especializada, a Cafesalud y sus clínicas, para que no sea liquidada, como ocurrió con Saludcoop.

“Se debería hacer una auditoría forense, evidenciar hacia dónde se han destinado los recursos y corregir las fallas administrativas que hay, especialmente en la atención de sus propios pacientes”, manifestó.

Por su lado, fuentes de la Alianza Somos 14 más 1, que agrupa a 17 clínicas y hospitales de Medellín, informaron que a la fecha ninguna de las instituciones le ha suspendido servicios a los usuarios de Cafesalud.

Pizarro ve la situación con preocupación, pues incluso tuvo que comprar con su dinero insumos para la atención de su hermano, como compresas y jeringas. Asimismo, tuvieron que trasladarlo en el carro de la familia a un centro donde le pudieran hacer una ecografía, pues en la clínica no había ambulancia ni insumos para el examen.

Empleados también sufren

Según uno de los empleados de la clínica Esimed, antigua Saludcoop de la 80, alrededor de 42 personas están en paro, pues ya van a ajustar tres meses sin que les cumplan con sus salarios.

Indicó que están en un punto en el que ni siquiera tienen dinero para el transporte, la alimentación y otros gastos de sus hogares.

Asimismo, el empleado, quien pidió reserva de su identidad, explicó que ayer la clínica no tenía quién le prestara servicios de vigilancia, por lo cual le ofrecieron dinero a algunos trabajadores que están en cese de actividades para que cumplieran con la labor, algunos la aceptaron, en vista de que necesitan el dinero.

La crisis se siente en otras instituciones

Al día de hoy, de 28 cirujanos que trabajaban en el Instituto de Cancerología, una filial de la promotora médica Las Américas, solo hay seis que realizan sus labores, luego de que los demás fueran despedidos a inicios de esta semana.

La situación ha llevado a que no se estén realizando cirugías de tórax, ginecología oncológica ni de urología oncológica, entre otras, explicó René Pareja, ginecólogo oncólogo.

Asimismo indicó que en este momento se está negociando con el Instituto para buscar posibilidades de que se reintegre a los empleados, siempre y cuando las modalidades de contratación garanticen el bienestar de los pacientes y no vayan en detrimento de las condiciones laborales de los especialistas.

“El IDC tomó la decisión de despedirnos, en vista de sus dificultades de cartera, estamos buscando la forma de regresar a las labores, pero que nos paguen lo que merecemos por nuestra experiencia y formación”, sostuvo.

Entre tanto, Germán Reyes, presidente de la Asociación Médica Sindical de Antioquia (Asmedas), dijo que alrededor de 15 cirugías por día se han quedado represadas por causa del despido y que los pacientes llegan a perder sus citas y vuelven a quedar en las listas de espera.

Al respecto, Pareja expresó que la institución está remitiendo a los pacientes a otras instituciones para que sean atendidos.

La última fase de la negociación es la próxima semana y la decisión se tomará con base en una consulta que se haga con todos los cirujanos que fueron despedidos.