Cada vez que los habitantes del denominado pulmón del planeta escuchan que habrá una jornada de salud, se preparan para emprender una travesía utilizando cualquier medio de transporte posible: horas de camino a pie, kilómetros en canoa o, en el mejor de los casos, en mototaxi, principal medio de transporte dentro de Leticia, la capital del Amazonas. La meta es lograr unos minutos con un especialista de la salud y poder contarle de sus dolencias o las de sus hijos. (Vea más imágenes: La odisea para acceder a un médico especialista en Amazonas)

El municipio representa el 60 por ciento de la población del departamento y en su mayoría sus habitantes pertenecen a comunidades indígenas como uitotos, ticunas, ingas, tukanos y nukak, las cuales, debido a las condiciones propias de la zona, se ven afectadas por enfermedades, en especial la población infantil. La falta de recursos y el difícil acceso al departamento mantienen limitado el servicio de la salud.

Para atender esa necesidad, los profesionales oficiales de la reserva de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) realizaron a finales de marzo una nueva jornada de apoyo al desarrollo, en la que más de 1.500 habitantes recibieron atención especializada en el municipio, que por estos días enfrenta una fuerte crisis sanitaria por la ola invernal. (Lea también: Leticia se ahoga entre la lluvia y la basura)

El equipo, conformado por 25 profesionales de las áreas de pediatría, ginecología, dermatología, ortopedia, mastología, optometría y odontología, viajó desde Bogotá, con el apoyo del Grupo Aéreo del Amazonas, para prestar su servicio a los habitantes que se agruparon desde muy temprano en las instalaciones del hospital San Rafael de Leticia, esperando ser atendidos.

Luego de actos protocolarios, se abrieron las puertas del hospital y poco a poco los pacientes fueron pasando a consulta. Una vez examinados, reclamaron los respectivos medicamentos y recibieron donación de alimentos, ropa, calzado y diferentes elementos de uso diario en el hogar.

“Para nosotros es una gran oportunidad porque aquí no contamos con especialistas de este nivel y mucho menos con la entrega de medicamentos. Hoy atendieron a mi hija, los estábamos esperando hace meses”, le dijo Neuris Soraida Yacob a EL TIEMPO.

Foto: Jose Granados / EL TIEMPO

“Nosotros nos sentimos olvidados por el resto del país, por eso cada vez que se presentan estas jornadas, no importa el tiempo que se deba caminar, navegar o hacer una fila, no es tan largo como el tiempo que debemos esperar para lograr un servicio de este tipo”, expresó Álvaro Curico, uno de los beneficiados, al tiempo que observaba a sus nietos, en medio de una larga fila.

Dentro de la jornada, una de las actividades más llamativas fue la de Carmen Helena Chacón, la ‘Doctora Crazy’, de la Fundación Sonrisas de Colores, que se convirtió en un verdadero espacio de distracción para niños, jóvenes y adultos que observaban atentos los trucos y entretenidos actos ‘clown’. “Estas personas no tiene la oportunidad de ver esto todos los días, los rostros de asombro y la sonrisa de niños y viejos hacen que uno vuelva con la satisfacción del deber cumplido a Bogotá, hay que dejar una semilla bien sembrada”, expresó Chacón, voluntaria de la jornada.

La atención a los niños fue prioritaria, teniendo en cuenta el alto índice de desnutrición, parasitosis y enfermedades respiratorias que se registra en la población infantil en el departamento de Amazonas. Según cifras entregadas por Luis Ángel Perdomo, director de Salud de Leticia, entre 2013 y 2014 nueve infantes murieron por insuficiencia nutricional, ocho por infección respiratoria aguda y dos por infección diarreica aguda. Además, se registraron 35 casos de muerte perinatal o neonatal tardía.

El director de salud de Leticia también le dijo a EL TIEMPO: “Aunque hace pocos meses la Administración Municipal hizo una inversión importante en la red pública del hospital San Rafael con la compra de equipos biomédicos, aún tenemos un escaso segundo nivel de salud. Los especialistas de tercer nivel son muy costosos para mantenerlos de planta en la región, cuando logramos traerlos se hace por demanda, es decir, tenemos que esperar a que haya un grupo de pacientes que requieran el servicio para hacer el llamado al especialista y pueda atenderlos en un mismo espacio de tiempo”, contestó el funcionario.

Foto: Jose Mauricio Granados / EL TIEMPO

“Por otra parte, las acciones contratadas con las EPS que operan aquí no se cumplen a cabalidad, entre ellas la visita a comunidades indígenas que habitan en zonas alejadas; es allí donde el departamento debe ser más estricto con estas empresas. Estas personas deben hacer grandes recorridos para llegar hasta un centro de salud. Las brigadas que hemos realizado sobre el río, las hacemos en lanchas motorizadas y nos gastamos horas, a estas personas les toca desplazarse en canoas”, resaltó el Director de Salud.

Perdomo también recalcó que debe mantenerse un puente directo con estas instituciones con la FAC o la Patrulla Aérea, pues logran estrechar el tiempo en el que los habitantes del departamento acceden a atención especializada.

“Contribuir con el bienestar de las comunidades indígenas del sur del país hace parte de los planes de responsabilidad social de la FAC, para ello contamos con el apoyo de los profesionales de la Reserva, que interrumpen sus actividades cotidianas para cumplirle voluntariamente a estas personas que tanto lo necesitan”, explicó a su turno el coronel Jairo Orlando Orjuela Arévalo, comandante del grupo aéreo del Amazonas.

“Es satisfactorio ayudar a las comunidades menos favorecidas, especialmente en esta región alejada, en la que se dificulta más el acceso a la salud”, dijo a su vez el capitán de la reserva Luis Gabriel González. “Nos acompaña la Corporación Condor, que nos apoya con talento humano e insumos para el desarrollo de las actividades, también la fundación Sonrisas de Colores y el Capitán Paz, amigo de niños y niñas”, añadió el capitán.

La jornada fue realizada entre el 28 y el 29 de marzo y contó con el apoyo de la Gobernación del Amazonas, el Hospital San Rafael de Leticia, la Caja de Compensación Familiar CAFAMAZ, el Departamento de Policía Amazonas, la Cruz Roja Colombiana y la Defensa Civil seccional Amazonas.