Lo devolvieron del hospital y murió asfixiado

Luis Miguel Ramírez Vélez no alcanzó a cumplir sus sueños de adolescente, pues con tan solo 15 años de edad murió asfixiado en el hospital San Vicente de Paúl de Caldas, según sus familiares, por una supuesta negligencia médica en el centro asistencial.

Todo empezó hace más de dos meses con una gripa que se fue complicando y por la que inició una serie de revisiones en su EPS. Alcanzó a tener cuatro revisiones en Sura, en las cuales los médicos dijeron que era una enfermedad general y solo le mandaron vitaminas y un jarabe, como lo demostró su madre con la historia clínica, además de afirmar que pidió una cita para exámenes médicos el pasado jueves y se la dieron para ocho días después (marzo 12), cuando ya no hay nada por hacer.

El estado de salud de Luis Miguel empezó a empeorar. En la madrugada del sábado anterior se vio tan mal, que le sugirió a su mamá que lo llevara a urgencias en el hospital. Allí, conforme dijo su madre, habrían dejado morir a Luis Miguel.

“En el triage (primera atención), la doctora lo que dijo fue que el niño no tenía nada y que tenía mejores pulmones que un bebé recién nacido. A mí no me dejó hablar que porque el niño era el paciente y no yo, pero el niño no podía expresarse bien de lo asfixiado que estaba. Siendo las 2:35 de la mañana lo mandó para la casa”, aseguró Ángela*, madre del menor.

Minutos después de llegar a la casa, Luis Miguel se levantó al baño y empezó a gritarle a su mamá las que serían sus últimas palabras en vida: “Mami, lléveme, lléveme que estoy mal”. El menor cayó en brazos de su madre y fue trasladado de nuevo al hospital, donde se reunieron entre 8 y 10 personas, entre médicos y enfermeras, para tratar de salvarle la vida, aunque, según el relato de los familiares, fue demasiado tarde, pues manifiestan que lo atendieron cuando no había nada por hacer.

Los médicos del hospital no se quisieron pronunciar al respecto y nos entregaron el número telefónico del gerente Róbinson Bustamante que, como nos dijeron, estaba esperando ser contactado por Q’HUBO, sin embargo, nunca contestó a las múltiples llamadas ni al mensaje que le dejamos. No obstante, las páginas quedan abiertas para su respuesta, mientras que ya será Medicina Legal la que determine las causas de muerte del adolescente.

*Se cambió el nombre de la madre a petición de ella.